Bellinzona Ciudades

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Introducción

La silueta de la capital cantonal del Ticino está dominada por la fortaleza de Bellinzona, que forma parte del Patrimonio de la Unesco. Consta de tres castillos y unas murallas que encierran todo el valle. La fortaleza es el único ejemplo de arquitectura militar medieval de este tipo en Europa.

Descripción

Bellinzona (en alemán, Bellenz) está situada en un estratégico y estrecho valle a la entrada de los puertos alpinos de San Gotardo, San Bernardino y Lukmanier. La ciudad es a la vez la puerta de Italia por el norte y la llave de los Alpes por el sur.

Los rincones y plazas, los patios, el teatro neoclásico y las casas antiguas restauradas con esmero cuentan a los visitantes la historia de una ciudad cultural lombarda. Sus callejuelas están flanqueadas por mansiones ricamente decoradas y bellas iglesias. Sin embargo, tras el austero encanto de la ciudad medieval se esconde la palpitante vida de un moderno centro de reuniones. Numerosas boutiques, tiendas especializadas en gastronomía y cafés invitan a pasear y pasar el rato. Todos los sábados se celebra un gran mercado en el centro histórico de la ciudad.

La importancia estratégica de la ciudad ya fue reconocida por los antiguos romanos, que construyeron aquí un «castrum» en el siglo I, que se fortificó en la Edad Media y se convirtió en una fortaleza inexpugnable durante mucho tiempo. Debido a su ubicación, Bellinzona fue objeto de innumerables conflictos entre los duques de Milán y la Confederación suiza. No fue hasta 1516 cuando la Confederación consiguió anexionar la ciudad a su territorio.

Las fortificaciones defensivas de Bellinzona son uno de los testimonios más importantes de la arquitectura militar de la Edad Media en la región alpina, por lo que fueron incluidas en la lista del Patrimonio de la Unesco en 2000. Desde los tres castillos se disfruta de una magnífica panorámica de la ciudad y las montañas circundantes hasta el lago Maggiore.

La fortaleza es el símbolo de la capital del Ticino y acoge diversas actividades. En Castelgrande, un pequeño museo documenta la historia de los castillos y del centro de la ciudad. En Montebello, la exposición «Arqueología de Montebello» muestra una selección de hallazgos del Ticino, centrada en la región de Bellinzona y los valles superiores.

Además, en Castelgrande y Sasso Corbaro se organizan exposiciones temporales sobre temas muy variados periódicamente.

Bellinzona goza de una ubicación ideal para realizar excursiones a los cercanos centros de vacaciones de Locarno y Ascona, por el Monte Ceneri hacia el sur del Ticino con su centro, Lugano, hacia los románticos valles laterales del Ticino o hacia el norte, hacia el Leventina, con el valle de Bedretto, o hacia el soleado valle de Blenio.

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