Así es la Engadina
La Engadina se encuentra en el sureste de Suiza, en
Graubünden. El valle, con sus lagos, montañas y valles laterales, es una de las regiones de vacaciones y excursiones más populares de Suiza.
Descubrir la Engadina
Se puede llegar a la Engadina desde todas las direcciones. El viaje en tren por el trayecto
Albula/Bernina, Patrimonio de la UNESCO a
St. Moritz es único. En una incursión por la ilustre ciudad, descubre la Chesa Veglia, una de las granjas más antiguas de la Engadina. Artículos locales como esculturas de madera, miel o carne seca se pueden encontrar en
Pontresina o en
Silvaplana. En
Bever y
Zuoz, las fachadas esgrafiadas son encantadoras y, en
Samedan, el
Mineralbad & Spa fascina con sus baños de aguas minerales. Se puede disfrutar de una gran vista de la Engadina desde la montaña
Muottas Muragl.
Lagos de la Engadina
Cuatro grandes lagos de montaña y muchos otros pequeños caracterizan la Engadina. Donde el «Segl-Maria» navega a través del lago
Silsersee en la estación cálida, los pescadores prueban suerte con la pesca en hielo en invierno. Cuando sopla el viento de Maloja, los aficionados al windsurf y al kitesurf retozan en el lago
Silvaplanersee. En ocasión del ilustre White Turf, el helado lago St. Moritzersee se convierte en invierno en hipódromo. Sin duda, la
pista esquí de fondo más bonita discurre a través de los cuatro lagos congelados.
Deporte y aventura en la Engadina
Montañas, valles, lagos y una infraestructura de primer nivel: te garantizamos que nunca te aburrirás en la Engadina. De primavera a otoño, aguardan rutas de senderismo,
bike-trails,
campos de golf y, por supuesto, deportes acuáticos de todo tipo. El invierno de la Engadina es legendario con sus pistas de esquí de fondo, los
snowparks y sus enormes estaciones de esquí. En el
safari en la nieve puedes descubrir nueve de las pistas más hermosas en un solo día. ¿Cuál es la ocupación paralela favorita de la Engadina? Tomar el sol en la terraza de un restaurante de montaña.
Alrededores de la Engadina
La Engadina es el punto de partida ideal para las mejores excursiones: descubre el encantador Val Bever, la
Baja Engadina con los pueblos
Guarda y
Scuol o el puerto del Bernina con los
lagos Bianco y Nero. A través del
puerto de Maloja se llega a
Bregaglia con el pueblo de montaña
Soglio. En el otro extremo del valle se encuentra
Zernez, puerta de entrada a la naturaleza salvaje del
Parque nacional.
La Engadina a un precio asequible
Ferrocarriles de montaña incluidos: a partir de una estancia de dos noches, los ferrocarriles de la Alta Engadina son gratuitos en verano y otoño. En invierno, puedes beneficiarte de atractivas
ofertas de forfaits como el Snow Deal o el Sleep + Ski.