Grimentz
Introducción
El paseo por esta localidad constituye el punto álgido de la visita al Val d'Annivier, con su estrecha calle principal sin coches, jalonada de casas de madera casi quemadas por el sol, adornadas con cientos de geranios de un rojo apasionado. En el centro del pueblo, las bodegas custodian el vino de glaciar, en el Tonneau de l’Evêque.
El Val d'Anniviers es un puro espectáculo. Contemplar la bella carretera de montaña junto a la garganta ya es motivo de alegría, para después ver insinuarse de repente la montaña nevada tras el valle.
El pintoresco pueblo de Grimentz, en el Valais, situado a 1564 metros de altitud, pertenece a la comuna de Anniviers en el valle del mismo nombre. Un paseo por el pueblo revela todo el encanto de esta localidad, cuyo centro está marcado por la casa señorial construida en 1550. En sus bodegas madura un vino de glaciar blanco en antiguos barriles de alerce: una especialidad vitivinícola de los antiguos campesinos nómadas. Antiguamente, solo se escanciaban sus gotas cuando el obispo visitaba el lugar ese año.
En Val d’Anniviers, 100 kilómetros de senderos y rutas para bicicletas invitan a disfrutar de la naturaleza. En los terrenos que ha dejado atrás el glaciar Moiry se pueden observar una serie de formaciones geomorfológicas, además de superficies de hielo cubiertas con material de arrastre de morrenas y glaciares de roca.
En invierno, la región ofrece una estación de esquí que se extiende hasta los 3000 m de altura. El programa de actividades de la zona se completa con un parque de diversiones, tours, pistas de esquí de fondo y trineo y senderos para excursiones invernales.
