La Grande Cariçaie alberga alrededor de 10 000 especies de animales y 800 especies de plantas. Alberga, por ende, un cuarto de toda la flora y fauna de Suiza, entre las que se encuentran algunas especies raras y en peligro de extinción. Es fundamental preservar y proteger esta rica biodiversidad. Esto no significa que se deba dificultar el acceso a los visitantes, sino que con paneles informativos, talleres y visitas guiadas se busca llamar la atención sobre la fragilidad del ecosistema. 

Los biólogos de la Association de la Grande Cariçaie comparten el seguimiento de la flora y la fauna. Sus tareas principales incluyen el análisis de grupos de especies y la mejor protección posible de los hábitats naturales de animales y plantas. Especialmente aquellos que son raros y están en peligro de extinción en Suiza, pero que están bien representados en la Grande Cariçaie. Si los biólogos detectan desarrollos negativos, pueden alertar a la Association de la Grande Cariçaie, que luego deberá tomar medidas para garantizar su protección. Los biólogos trabajan principalmente al aire libre durante los meses más cálidos (también se realiza un poco de observación de aves en el invierno). En primavera y verano están en el campo la mitad del tiempo. 

Christophe Le Nédic es biólogo titulado. Obtuvo su título en 1988 en la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad de Lausanne. Llegó a la biología a través de su pasión por la conservación y la observación de aves, actividad que practica desde que tiene diez años. Su trabajo en la Association de la Grande Cariçaie comenzó en 1987 como parte de un encargo para el monitoreo de la flora y la vegetación. En 1990 comenzó como responsable de la vigilancia botánica, pero luego se interesó por las relaciones públicas. Hoy ya casi no se ocupa de la botánica, sino de la comunicación y el control de los visitantes en las reservas naturales. También está a cargo de la protección legal del área relacionada con todos los proyectos de ordenación del territorio alrededor de la zona protegida.

Antes de salir a la naturaleza, conviene hablar del término «Grande Cariçaie», porque la reserva natural lleva el nombre de una especie de planta que está omnipresente en las ocho reservas: la Carex elata. Planta de hierba agria que forma una especie de racimo (borlas) y crece hasta un metro de altura. Es una planta de pantano muy extendida en Suiza. 

Otra característica de la Grande Cariçaie son las pasarelas de madera que permiten caminar entre el Carex elata y los juncos. Esto hace que la experiencia de la naturaleza sea aún más intensa para los visitantes. El relajante murmullo de las cañas que se oye cuando sopla la suave brisa estival le acompañará en los paseos por la Grande Cariçaie. Si camina despacio, mire a izquierda y derecha: descubrirá no solo insectos, sino también numerosas especies de aves, hasta posiblemente podrá ver algún castor diligente. 

• El somormujo lavanco suele pasear con sus crías en mayo y donde se le suele ver más es en Pro Natura Zentrum Champ-Pittet.
• El castor deja sus huellas a lo largo de la orilla. Puede tratar de observarlo allí especialmente de noche.
• En el centro BirdLife de La Sauge es posible observar al martín pescador durante su periodo de reproducción.
• El «cola de bigote» es la mascota de Grande Cariçaie y es fácil verlo cerca de la playa de Gletteren.

Antes de comenzar el recorrido de exploración en la Grande Cariçaie. Hay algunas reglas de conducta para explorar la Grande Cariçaie:

• permanezca en los senderos y en las áreas permitidas
• pasee al perro con correa
• no moleste a los animales y no recoja flores
• llévese su basura
• está prohibido hacer fuego y acampar, excepto en las áreas designadas para ello
  
  

El BirdLife-Naturzentrum en La Sauge se encuentra en la orilla sureste del lago de Neuchâtel, al borde de la reserva natural de Cudrefin. Cudrefin es una de las ocho reservas naturales que componen la Grande Cariçaie. El centro natural incluye exposiciones especiales y un sendero natural al aire libre de 500 metros de largo con cuatro cabañas de observación. Todo lo necesario para un viaje con éxito: binoculares, guía y paciencia, porque aquí los animales se observan sin molestarlos. El centro y las instalaciones al aire libre son completamente accesibles para sillas de ruedas.

Un consejo: tome el barco desde Murten a través del canal Broye y bájese en La Sauge. Luego, continúe a pie o en bicicleta hasta la Grande Cariçaie.

En el lado occidental del lago, cerca de Yverdon-les-Bains el Pro Natura Zentrum Champ-Pittet es la puerta de entrada a la reserva natural Grande Cariçaie. 

Se puede reservar una visita guiada con biólogos por el área de Grande Cariçaie no solo en el BirdLife-Naturzentrum La Sauge, sino también en el Pro Natura Zentrum Champ-Pittet. Por supuesto, los visitantes pueden explorar los terrenos por su cuenta siguiendo los tres senderos de interpretación de la naturaleza a través de la ciénaga, el bosque y los jardines. Se pueden alquilar binoculares en la recepción. También hay una colmena centenaria, una exposición sobre miel y abejas silvestres, y dos carreras en las que los más pequeños recorren todo el recinto tras la pista de un ladrón de miel y una madre erizo desaparecida.

En la Grande Cariçaie hay numerosas playas de baño que bordean la orilla de la Grande Cariçaie y deparan horas tranquilas y relajantes en la playa con una magnífica puesta de sol. Aquellos que prefieran mezclarse con los lugareños y disfrutar de una noche entretenida encontrarán los restaurantes y bares más de moda en Estavayer-le-Lac en la Lacustres Plage o en la Nouvelle Plage. 

En el pueblo lacustre de Gletterens, los visitantes descubren un típico asentamiento neolítico suizo. Gracias a auténticas reconstrucciones, los visitantes pueden descubrir cómo vivían nuestros antepasados, admirar los restos arqueológicos y hacerse una idea apasionante de la vida hace miles de años.

El pueblo lacustre de Gletterens organiza eventos, actividades y talleres basados en la prehistoria y la vida de los primeros agricultores que vivieron a orillas del lago de Neuchâtel. Además de actividades y demostraciones de oficios prehistóricos, el pueblo lacustre ofrece alojamientos especiales. De mediados de mayo a mediados de septiembre, los tipis y otros refugios de pieles resistentes a la intemperie le harán sentirse como un hombre o una mujer de la prehistoria.

En la Grande Cariçaie hay numerosas oportunidades para descubrir la flora y la fauna:

• en una ruta guiada en canoa
• desde numerosas torres de observación
• en otras excursiones de verano: ya sea en bicicleta, en una tabla de remo o en una caza de castores

Se recomienda encarecidamente el viaje en barco de aproximadamente una hora y media desde Murten a Neuchâtel: Desde la medieval Murten, la pequeña ciudad de los Zähringer, se llega caminando a lo largo de los viñedos de Vully y a través del canal Broye a Neuchâtel, la ciudad dominada por la Belle Epoque. Quien desee ir en barco desde Murten directamente a la Grande Cariçaie, podrá bajarse en la parada «La Sauge», en el canal Broye, visitar allí el centro de naturaleza BirdLife y realizar una caminata tranquila en la Grande Cariçaie. Hay autobuses y trenes que circulan regularmente entre los pueblos.