Hotel Schönegg
Gran amor por los detalles: para conservar su autenticidad y su encanto exclusivo, el Hotel Schönegg fue renovado con madera antigua y dotada de antigüedades selectas. Desde sus habitaciones, los huéspedes disfrutan de una vista panorámica espectacular, mientras que en el restaurante puede disfrutar a la luz de velas de las exquisiteces de la cocina. Es, dicho sea de paso, el único hotel en Wengen que no acoge grupos. Con ello, es un auténtico "oasis" de individualistas.