Pueblos antiguos

Winterthur fue mencionado en un documento ya en 1180. Los romanos llamaron el asentamiento Vitudurum. Las filas compactas de casas, los muchos callejones, los patios y las plazas románticas invitan a ser descubiertas.

Arte culinario, cultura y cerveza se combinan en la pequeña ciudad de Rheinfelden, en el Alto Rin, en Aargau. Este pequeño casco antiguo medieval, el de la ciudad de los Zähringer más antigua de Suiza, invita a pasear. Al salir de la ciudad, un edificio llama la atención: el de la cervecería Feldschlösschen. Es la principal fábrica de Suiza y produce una cerveza excelente.

Sion, en alemán Sitten, es la capital del cantón del Valais. El casco antiguo de la ciudad, ubicado entre las colinas Valère y Tourbillon, data de la Edad Media y alberga numerosas atracciones turísticas, como uno de los órganos más antiguos del mundo que todavía está en funcionamiento.

Los majestuosos árboles y el amplio paseo a orillas del río son un verdadero placer para la vista en todas las estaciones del año. Su ubicación directamente junto al Rin y la espectacular vista de las fachadas del casco antiguo hacen de los tres parques de Rheinfelden un lugar muy fotografiado.

La catedral es uno de los monumentos principales de Basilea. La antigua iglesia episcopal, situada en una posición notable sobre el Rin, preside la región.

Sobre la pequeña ciudad de Neuchâtel se alza el castillo del mismo nombre, magníficamente conservado tras más de 1000 años de historia, que dio nombre a la ciudad. Desde aquí se contemplan las mejores vistas a lo largo y a lo ancho.

Ginebra, también conocida como la metrópoli más pequeña debido a su atmósfera multicultural, tiene un casco antiguo muy activo con tabernas, galerías de arte y tiendas de antigüedades. Y en lo alto de la colina que alberga al casco antiguo, se alza la Catedral de Saint-Pierre.

Todos los sábados, residentes y visitantes se reúnen en el colorido mercado semanal que va adentrándose desde la Piazza Nosetto por los callejones del casco antiguo.

El casco antiguo de Lausanne alberga impresionantes construcciones de la Edad Media, como la famosa catedral de Notre-Dame. Pero, aparte de ella, esta encantadora ciudad a orillas del lago de Ginebra también tiene mucho que ofrecer, como por ejemplo el primer metro de montaña de Suiza.

Desde los históricos pueblos de Lavaux hasta las vertiginosas cumbres del Rochers-de-Naye y las aguas cristalinas del lago Lemán... ¡Si visita la región de Montreux Riviera tendrá un viaje de película! Los mágicos paisajes, un magnífico panorama y un estilo de vida auténtico hacen de esta experiencia una maravilla.

Solothurn es considerada la ciudad barroca más hermosa de Suiza. Sus construcciones más atractivas provienen de diversos periodos históricos, como la torre del reloj de la primera mitad del siglo XII y la catedral barroca-clasicista de Santa Úrsula del año 1773.

En verano, la capital del cantón de Jura se sumerge en el mundo del cómic. El festival «Delémont'BD», que honra y celebra el arte del cómic, anima el casco antiguo de Delémont. 

Lausana, ciudad en pendiente frente al lago Lemán y a las montañas, ofrece una serie de panoramas extraordinarios a los paseantes. En este paseo en pendiente podremos descubrir las 10 vistas más bonitas de Lausana.

Aarau es famosa por sus preciosos tejados decorados. Ofrece oportunidades de compras tan variadas como coloridos son los tejados a dos aguas pintados con delicadeza. Aarau, como tradicional ciudad de mercado y moderno centro comercial, tiene mucho que ofrecer tanto para el día a día como para ocasiones especiales.

En el campanario de la catedral gótica, sobre la colina del casco antiguo, vive el habitante más misterioso de la ciudad.

Olten se encuentra directamente junto al Aar y cuenta con un precioso casco antiguo histórico con extensas zonas peatonales. Se sentirá tentado a pasar el tiempo aquí gracias a sus numerosas instalaciones culturales, una playa, cafés, restaurantes, heladerías y una atractiva mezcla de varias tiendas.

No se puede imaginar la ciudad sin ellos: los bares de azotea de Zúrich le ofrecen un refrescante aire urbano en las alturas en los calurosos días de verano, todo esto con las mejores vistas.

La "Fraumünster Kirche" en la orilla occidental del Limmat es con su torre verdusca uno de los monumentos de Zurich. Son especialmente conocidos las ventanas de cristal de Marc Chagall y Augusto Giacometti.

El monumento de Zug tiene una altura de 52 metros. La parte más baja fue construida como sencillo paso en la antigua muralla. Hans Felder, el constructor de la iglesia St.Oswald, construyó la parte superior de la torre de 1478 a 1480.

Una vez al año, el casco antiguo de Aarau adopta un ambiente alegre para el Bachfischet, una de las tradiciones vivas más antiguas de Suiza. Con una procesión festiva de faroles a través de los callejones oscuros del casco antiguo se celebra desde hace siglos el final de la limpieza anual del arroyo de la ciudad. Al mismo tiempo, la ciudad ofrece un gran número de atracciones únicas que hacen de Aarau un destino turístico inolvidable.

Desde principios de abril hasta finales de octubre, todos los sábados se organiza una visita guiada por la ciudad muy interesante. En dicho recorrido podrá admirar la nueva estación de tren de Lugano, la catedral, recientemente restaurada, y la ciudad desde las alturas.

Quien desee ir de compras por una bonita y pequeña ciudad, en Solothurn, estará en el lugar correcto. Por todos lados, preciosas tiendas y pequeñas boutiques invitan a pasear y comprar.

El castillo de Chillon, ubicado sobre una roca a orillas del lago de Ginebra, es uno de los edificios de carácter histórico más visitados de Suiza. Durante casi cuatro siglos fue la residencia de los condes de Saboya y un lucrativo puesto de aduana.

El «Funi» (funicular) discurre detrás de los barrios de Saane en Friburgo. Se trata de una «Joya de la ingeniería», incluida en el inventario de bienes culturales nacionales. Este nostálgico tren lleva en funcionamiento desde 1899, sin gases contaminantes.

La Biblioteca de la catedral de San Galo es una de las bibliotecas más antiguas del mundo. Es la pieza central del barrio abacial y te sumerge en la historia con su gran sala barroca y sus valiosos manuscritos.

En medio del Ródano “flota” el imponente Centro Cultural Forces Motrices. La antigua central hidroeléctrica es en hoy en día un renovado oasis, que cuenta con teatro, ópera y salas de exposición con capacidad para recibir hasta 950 personas.

Munot, el auténtico emblema de Schaffhausen, lleva más de 400 años coronando la ciudad. En la torre se encuentra la vivienda del vigilante, quien cada noche, a las 21.00 h, toca la famosa campana de Munot durante cinco minutos, naturalmente a mano, como en 1589.

La animada ciudad cultural y termal de Baden ofrece mucho más que las aguas termales con más minerales de Suiza.

Gracias a su aspecto urbano medieval conservado en grandes partes, la ciudad de Berna fue incluida en 1983 en el directorio de los Patrimonios Culturales Mundiales de la UNESCO.

En Zurich se puede disfrutar de excelentes obras muy de cerca. La Ópera de Zurich, con 1100 localidades, es la más pequeña de las óperas internacionales.

Antes de la construcción del antiguo puente, en la época del Imperio romano ya existía un fuerte en Olten que servía para proteger el cruce del río. El antiguo puente se menciona por primera vez en 1295.

Cada primer viernes de mes, el casco antiguo de Biel/Bienne muestra su mejor cara. Un animado festival callejero sumerge a la ciudad en un ambiente único.